sábado, 2 de abril de 2011

Gobiernos abiertos con burocracias cerradas?

La implantación del modelo de Gobierno Abierto en cualquier sociedad presenta retos comunes que hemos abordado en este blog en otras oportunidades como lo son la captación de los liderazgos políticos que impulsen este cambio del modelo de gestión (Datos Públicos: Decisión Política ), la base legal que sustenta la apertura de datos, (DAIP Practico en la legislacion Venezolana) y las tecnologías involucradas para su publicación, visualización y procesamiento (Con los datos públicos los Ciudadanos sabemos que hacer, sabrán que hacer las Administraciones Publicas?), cada una de estas con los elementos o matices locales a considerar en distintos grados de intensidad en los niveles Ejecutivo, de la Administración Publica y el Ciudadano.

En esta oportunidad intentaremos superar los obstáculos que presenta un sector cada vez mas importante de esta triada, La Administración Publica y mas específicamente, los funcionarios públicos a para los cuales esta, representa su fuente de ingresos.

La burocracia tiene características que contribuyen como pocas a crear una atmósfera proclive a la estabilidad. Nada asusta mas a la burocracia que los cambios. Es la burocracia uno de los sectores mas conformistas de toda la sociedad. Como allí se goza, desde hace décadas, de la inamovilidad laboral, el burócrata teme toda innovación por que cree le compromete esa conquista que garantiza sus ingresos. Los servidores del estado constituyen un elemento conservador en toda sociedad, quizás el elemento conservador por antonomasia.

Esa faceta conservadora se pone de manifiesto en las dificultades para el manejo del cambio en los procesos y labores de los funcionarios públicos, la innovación no es el fuerte de la administración publica y no es por falta de creatividad, es debido a que los procesos conocidos y tabulados son la garantía de su permanencia serena y segura bajo el cuerno de la abundancia estatal.

En ocasiones presionados por sectores que exigen cambios, realizan maromas gatopardianas que se diluyen hasta la próxima ola renovadora, y comienzan de nuevo el ciclo perverso.

Entonces? Como introducir un elemento tan revolucionario en los procesos públicos como lo es la apertura de datos en una burocracia tan cerrada?

Como romper con los vicios burocráticos que consideran la información publica un bien de carácter privado institucional?

Como convencer a una burocracia cercada por la inestabilidad gerencial, la cruda situación económica y la ausencia de procesos administrativos claros de liberar información publica?


Todo un reto cuando consideramos que la información es poder y al liberarla ceden ese capital a manos que podrían ser su competencia laboral...entregar ese valor a los clientes ciudadanos los deja sin capital de negociación, como decimos en latinoamerica: Podría el jefe darse cuenta que no somos tan necesarios y prescindir de nuestros servicios!

La estrategia para asumir este reto debe considerar múltiples aristas, implica variados enfoques que satisfagan las diversas expectativas de los involucrados en esta transacción de información que es la liberación de datos públicos como primer paso a los gobiernos abiertos.

Debemos acudir a las Administraciones publica y buscar a los funcionarios innovadores, propicié su reconocimiento y estimulo dentro de la administración, trabajar con ellos en marco de respeto y consideración, encontrar data que sea de mutuo interés liberar, no necesariamente data sensible o comprometedora, data sobre servicios de interés colectivo, legada o generada, e ir incrementalmente elevando la apuesta hasta que cambie el paradigma del valor de la informacion a el valor de la liberación de la información, que el funcionario comprenda que la puesta a disposición de la data publica a manos publicas posee un valor intrínseco muy superior a atesorar datos que pierden su valor con el tiempo.

Formar a los funcionarios públicos en la legislación de Transparencia y Acceso a la información, Interoperabilidad de instituciones publicas, participacion ciudadana y premiar su desempeño creativo, apoyar las actitudes colaborativas, fomentar alianzas funcionarios-ciudadanos que reconozcan el aporte del funcionario en la liberación de los datos y por sobre todas las cosas hacer uso intensivo de los servicios creados a partir del acceso a esa data.

Impulsar modelos organizativos de la sociedad que encuentren en la liberación de datos públicos su razón de ser, que diseñen aplicaciones que manipulen la data publica, que la transformen en conocimiento y que divulgue sus beneficios en forma de servicios útiles a la comunidad.

Este proceso de madurez incremental en la calidad y cantidad de la información debe ir formando las bases de una cultura de transparencia y generación de inteligencia colectiva, adoptando la liberación de datos de manera natural hasta que su uso sea un comodín de la sociedad y una actividad fundamental de la gobernabilidad democrática de nuestras administraciones publicas.

Fortalecer en la sociedad toda, los valores de cooperación, transparencia y colaboración que sustentan el cambio de modelo de gestión en la Administración publica e impulsar en el colectivo la visión de que vivimos una evolución del actual sistema democrático a un estado superior en el cual la convivencia y valores están basados en el establecimiento de mecanismos para la transparencia de los gobiernos así como de espacios permanentes de colaboración y participación de los ciudadanos más allá del ejercicio de derecho al voto cada cuatro años .

La liberación de datos debe ser beneficiosa para todos los involucrados, para el ciudadano que la usa y para el funcionario que la libera, una relación ganar – ganar, solo así avanzaremos hacia el cambio de paradigmas que representan los Gobiernos abiertos!